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Patatas rellenas

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Ingredientes (para 2 personas y un tupper de entresemana):

  • 3 o 4 patatas grandes (el doble si son pequeñas)
  • 200gr  de carne picada (ternera o mezcla de ternera y cerdo)
  • 1/2 cebolla
  • 1/2 vaso de vino blanco (no es imprescindible, puede usarse caldo de carne)
  • harina (para rebozar)
  • 1 huevo
  • 1 diente de ajo
  • perejil
  • sal
  • pimienta
  • 1/2 limón
  • un poco de pan rallado

Preparación:
  1. Pelar las patatas y cortarlas en 2 si son grandes. Vaciarlas con la ayuda del pelapatatas o sino con un cuchillo y mucha maña (yo como maña no tengo, me toca el pelapatatas). La patata que queda al vaciarlas se pone en la olla con un poco de agua (3 dedos aprox.).
    La patata vacía y la olla con el "relleno" que se le ha quitado a la patata
  2. Se pone en un bol la carne picada, con la mitad de la cebolla picada, el perejil, el huevo batido, la sal, la pimienta, unas gotas de limón (unas gotas = exprimir medio limón con la mano, no con el exprimidor) y un poco de pan rallado, que la mezcla no quede líquida y se mezcla todo bien mezcladito en el bol.
  3. Se rellenan las patatas con la mezcla y, con la carne que sobra, se hacen albóndigas.
  4. La patata rellena, y al fondo una enharinada
  5. Se rebozan las patatas rellenas por la harina, apretando bien por el lado del agujero y se fríen en abundante aceite caliente. Lo mismo con las albóndigas (primero harina, luego freír).
  6. Según vayan estando fritas, se van colocando en la olla.
  7. Se limpia el aceite de freír las patatas con una espumadera o colador, se le añade el resto de la cebolla y el ajo bien picado y se pone al fuego.
  8. cuando la cebolla esté dorada se le echa una cucharada de harina, el agua y el vino (o caldo).
  9. En el momento en el que rompe a hervir se vierte encima de las patatas de la olla.
  10. Se prueba la salsa de la olla para ver como está de sal, y se sazona. 
  11. Se deja cocer hasta que las patatas estén tiernas (10-15 min) echando más agua si se consume la salsa.





Cómo alegrarle el día a alguien

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Los días pueden ser una mierda por cosas más o menos importantes, por cosas puntuales o por otras prolongadas en el tiempo pero que en un momento determinado te pillan peor y no eres capaz de sobrellevarlo como siempre. Puede ser porque te dicen que tus extremidades nunca volverán a ser lo que eran, porque te has agobiado en el trabajo o porque la peluquera no entienda lo que quieres y haga lo que a ella le parece mejor (es decir, un cristo). Pues bueno, esos días se arreglan con chocolate de oreo y algún mimo. Pero hay otros, otros días de mierda, en los que se juntan varias cosas y eso no hay nada que lo arregle... o sí.

Siempre he sido una mimada, pero cuando tienes wifi con alguien, eres una mimada con suerte! Porque cuando te leen la mente, todos los regalos son mejores.

Bueno, a lo que vamos... que la semana pasada, mi día de mierda se convirtió en un día genial: me regalaron un kit para hacer macaroons! (ya veremos si sigo tan contenta cuando lo estrene, esperemos que sí).

Mi tesoro
El pack es genial, trae una fuente de silicona marcada que evitará que los macaroons se hagan del tamaño de África como me pasó en mis dos intentos anteriores, y de paso, evitará que chamusque bandejitas de no-silicona-pero-casi, o que salgan peor por hacerlo en papel de horno. También incluye el "repartidor de masa", que evitará tener que andar cortando bolsas zip o haciendo cristos con la cuchara. Y por supuesto, recetas: dulces y saladas (las saladas me han llamado particularmente la atención, en cuanto domine las dulces probaré la mastrujada de un macaroon de foie.
Los macaroons son uno de mis dulces preferidos (y mira que me gustan los dulces) así que tengo mil recetas que he leído pendientes y otras mil que están en mi cabeza y que quiero probar (más el añadido de las saladas, que eso ya veremos como evoluciona).

Y por si fuera poco regalo, tuve otro, que este ya lo he estrenado y me encanta.. me encanta más que los anteriores (que los anteriores libros, no los anteriores regalos):

El último Manolo (por ahora)
Muchas gracias, regalador :)

Casita de jengibre de Ikea

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Este fin de semana, la cuñá y yo hemos hecho manualidades con los peques (es lo que tiene pasar los fines de semana en Invernalia), pero nos lo hemos pasado pipa (no sé si nosotras mejor que los enanos, o igual).
Nos (remarco el nos para remarcar que a mi me gusta tanto como a los niños) compró una casita de jengibre de Ikea!

La casita empaquetada

Como cualquier otra cosa de Ikea viene con sus características instrucciones (lo que no traía era la llave en L, y la echamos mucho de menos).
La cuñá intentando descifrar las instrucciones

Lo primero que hay que señalar de esta cajita tan genial, es que por fuera todo es muy bonito, pero llega la hora de la verdad y sólo trae las paredes... ni cemento, ni muebles ni ná. Y todo esto sin avisar, pensábamos que las paredes tendrían ranuritas para poder engancharlas, pero nai.
De cemento usamos caramelo casero: derretimos azúcar en un cazo y lo untamos como buenamente pudimos. En este punto los enanos se lo pasaron pipa comiendo hilos de caramelo. Nosotras infernal-con-risas porque el caramelo quemaba, pegaba y las paredes no nos quedaban todo lo bien que queríamos... digamos que la torre de Pisa se podría haber basado en nuestra obra. La chimenea nos la repartimos, porque como el tejado no nos quedó con el ángulo ideal, pues no encajaba demasiado bien.

La casita con todos sus pegotes de caramelo.
Luego llegó lo divertido: decorar con icing sugar de colores.

Había que apretar bien para que saliese, sobretodo cuando el bote aun tenía la tapa puesta
Y este fue el resultado final que duró hasta la mañana siguiente en el desayuno, porque a parte de bonita, estaba rica!


Los arquitecto-diseñadores con su obra

Viñeta gastronómica

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Una viñeta de ellisto para alegrar un poco este viernes.
Me encanta el consejo final: frutos secos en las ensaladas sí, pero pelados! Algún consejo parecido habrían tenido que darle a una tía mía, que hizo empanada de nécoras... vivas!!

Marmitako

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Plato típico de mi Sr.Padre, otro de esos de los que intento, que me salgan como a él, pero sin demasiado éxito. Aunque ahora ya lo domino bastante bien, no es como el suyo... pero se come bien.
La mayoría de los fines de semana somos dos los que comemos en casa, mi conejillo de indias y yo, entre semana sólo yo, y llego a las 3 y media, así que o dejo la comida hecha del día anterior o más vale que me haga ya un bocadillo de Nocilla, porque en vez de comida me planto en una merienda-cena. Así que intento que las comidas del fin de semana sean lo suficientemente abundantes como para dejar la fiambrera el tupper del lunes listo.

Ingredientes (para 2 personas y un tupper de entresemana):

  • 1/2kg de bonito
  • 1/2kg de patata
  • Tomate (la mitad de la cantidad de patata) 
  • Aceite
  • 1/2 cebolla
  • 1/2 diente de ajo
  • Perejil
  • Sal
  • 1 vaso de caldo de pescado o agua 
  • Guindillas de cayena (De 1 a 3, según lo picante que se quiera, en nuestra casa 3 son pocas)
  • Pimienta negra
Preparación:
  1. Se pican el bonito y las patatas en dados.  Para que la salsa salga más espesa las patatas deben cortarse haciendo medio corte con el cuchillo y el otro medio rompiéndola, de forma que la primera mitad sea un corte limpio y la segunda mitad irregular.
  2. Se pican la cebolla, el ajo y se le quita la piel a los tomates para cortarlos en daditos. Aquí el truqui: si los tomates están congelados (yo es lo que hago, porque crudos no los uso para nada y así no se estropean) al meterlos debajo del grifo con agua caliente la piel sale sola. Si están frescos, la solución aquí.
  3. Se cubre el culo de la pota olla (nunca sé como llamarle) con aceite y se pone la cebolla a dorar, con fuego alto hasta que empieza a hervir y luego se baja un poco.
  4. Cuando la cebolla esté dorada, se cubre con el tomate y se sube el fuego otra vez hasta que empiece a hervir (cuando los tomates están congelados hace espuma y es normal, menudo zusto)
  5. Se añade el perejil, el ajo, y por encima el bonito cortado en dados.
  6. Cuando el bonito empieza a cambiar de color, se echan las patatas, la pimienta y las guindillas,  se cubre con el caldo (o el agua) y se pone la sal.
  7. Ponerlo a fuego fuerte hasta que empiece a hervir, y después dejarlo cocer fuego lento 30-45 minutos (hasta que las patatas estén cocidas)

Mis famosas galletas de Su

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Al poco tiempo de darme cuenta de que quería aprender a cocinar, conocí webosfritos.es y una de las primeras recetas que hice fue la de las galletas de mantequilla, no sé si porque en el nombre ponía "fáciles", o por lo de la mantequilla, o una mezcla de ambas. Las hice con la receta versión thermomix, que aunque no parece muy difícil, yo no las tenía todas conmigo de que eso fuese a salir bien. Durante el proceso pensé que estaba en lo cierto: la mantequilla no estaba a la temperatura adecuada, faltaba harina… son cosas que me siguen pasando, pero esas eran mis primeras galletas y no sabía que podía “retocarlas”.
La receta original está en webosfritos, aunque yo uso la mitad de cantidad de ingredientes y cambio la esencia de vainilla por azúcar vainillado:

Ingredientes (da para unas 30 galletitas):
  • 150gr de mantequilla a temperatura ambiente como mínimo (como en las espirales bicolor)
  • 100gr de azúcar
  • 1 huevo
  • 250gr de harina de repostería
  • 4 cucharaditas de azúcar vainillado
Preparación:
La preparación de la masa en la thermomix es súper sencilla:

  1. Se meten todos en el vaso y se pone a velocidad 6 medio minuto (Su recomienda 20 segundos, pero creo que por ser menos cantidad, alguna vez no se ha quedado bien mezclado, así que le doy unos segundos más).
  2. Se saca de la thermomix y se hace una bola, si se queda pegado a las manos se le echa más harina (aunque en este punto yo no lo he notado nunca). 
  3. Cuando ya no se pega, se mete en un bol y se tapa con film transparente para dejarla reposar una horita en la nevera. Como normalmente voy con prisas, al final pasa más tiempo del necesario en la nevera, así que se queda dura como un garrote. La solución es fácil: si tienes tiempo la dejas fuera un rato, sino, la metes unos segundos en el micro y ¡a amasar de nuevo! Es en este momento cuando me doy cuenta de que le falta harina porque se me queda pegada en las manos, se va echando poquito a poco, no vaya a ser que nos pasemos.
  4. Se pone un poco de masa entre dos trozos de film transparente y se alisa con el rodillo para que quede una lámina de medio centímetro de espesor (si le voy a poner glasa las hago más gorditas, para que sepan más a galleta).
  5. Se cortan con cortadores chulis y se meten al horno (calentado previamente). Cuando estoy cortando las galletitas, a veces se quedan pegadas al cortador, o se rompen al ir a meterlas en la bandeja del horno (por cierto, hay que cubrirlo con papel de hornear y poner las galletitas encima), si es así, se vuelve a hacer una bolita de masa y se añade más harina.
  6. Lo dicho, se meten al horno que ha sido precalentado y se dejan 10 minutos o un cuarto de hora (depende bastante del horno: la teoría es que precalentarse a 180º, y hacer las galletitas a esa misma temperatura. La realidad es que mi horno está como una regadera y si hago algo a 180 sale chamuscado, así que con mi teoría de que a 130 se consigue lo mismo que a 180 pero en más tiempo... las pongo a 130 y voy mirando como van, hasta que empiezan a estar doraditas).
  7. Cuando empiezan a estar doradas se sacan y se colocan en una rejilla a enfriar.  Una vez frías se decoran al gusto del consumidor: con azúcar glass, con chocolate...

La verdad es que resultaron ser un éxito (y a la primera, no como con otras recetas que tengo que hacer varios intentos hasta que consigo que queden decentes), a mi conejillo de indias le gustaron mucho (las hice por la tarde y no pasaron del día siguiente), luego las probó mi prima peque y le encantaron (un día le dije que le iba a llevar algo que le iba a encantar y me dijo “¿Tus galletas de mantequilla?”). Me animó bastante a seguir intentado cocinar, y se han quedado como unas galletas especiales para mí.

Las primeras (algunas están quemadas porque eran mucho más finitas que las demás )


Con el tiempo me he ido animando a decorarlas o modificarlas mínimamente:
  • Con pepitas de chocolate (le pongo las pepitas antes de meterlas al horno, porque se pegan mucho mejor)
  • Con lacasitos (se ponen en la masa, antes de estirarla y cortarla)
  • Con fondant de nubes (la primera vez que las hice tuve ayuda de un supercocinero y acabamos los dos con las manos como Hulk)
Aquí mi ayudante hulkeado, el color salió bastante bien, menos de las uñas :S

  • Con icing de colores
El primer icing y el primer fondant de colores, que no nos quedó demasiado homogéneo: las prisas, queríamos comérnoslas! Ahora tenemos la técnica más depurada y hacemos dibujos de arañas, banderas, caritas sonrientes y mucho más. Desgraciadamente no hay documentos gráficos porque somos unos Trikys.
  • Y… cuando me queda la masa pegajosa después de reposar algunas veces lo arreglo echándole más harina y otras le echo Nesquik y hago galletas de mantequilla de chocolate (una bomba, vaya).


Mis primeros cupcakes: los de Nesquik de Alma

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Tras varios intentos fallidos, por fin me han salido. Como ya me pasó con las lentejas, a los cupcakes también les he dado penita con mi brazo roto.
He de decir que los primeros que hice me salieron medio bien, (siendo justa: 3/4 bien). Las muffins estaban ricas y con buena presencia, el buttercream estaba aceptable para ser el primero que hacía, pero la decoración... horrorosa. Luego lo volví a intentar, pero entre el horno y la leche (la receta es con semi y los hice con desnatada) fue un desastre absoluto: de la bandeja del horno a la basura.
Y por fin, mi bracito y yo nos pusimos manos a la obra, en uno de esos días en los que me da una tregua, y salieron.


La receta original es de Alma, aunque se la he modificado un pelín (adaptada para intolerantes, y cambiando el topping, porque cuando conseguí el Nesquik de fresa ya era imposible conseguir carbón de reyes).

Ingredientes (muffin): (para 12 cupcakes grandes o 48 pequeños, yo hice 6 grandes y el resto chiquitines, que están más ricos)

  • 115gr de mantequilla a temperatura ambiente (o con 10segundos de micro).
  • 220gr de azúcar.
  • 220gr de harina de repostería.
  • 120ml de leche semidesnatada sin lactosa.
  • 1 cucharadita y media de levadura química. 
  • 2 huevos.
  • 4 cucharadas de Nesquik.

Ingredientes (buttercream):

  • 250gr de mantequilla.
  • 400gr de azúcar glass.
  • 3 cucharadas de Nesquik.
  • 60ml de leche semi sin lactosa.
Ingredientes (decoración):
  • 3 fresas grandes o 6 pequeñas.
Preparación (muffin) :
  1. Tamizar la harina con la levadura y reservar.
  2. Mezclar la leche con el Nesquik y reservar.
  3. Batir la mantequilla con el azúcar.
  4. Añadir los huevos 1 a 1 y seguir batiendo.
  5. Añadir la mitad de la harina con la levadura y seguir batiendo hasta que se incorpore.
  6. Añadir la leche con el Nesquik y volver a batir.
  7. Añadir el resto de la harina con la levadura y batir más.
  8. Precalentar el horno a 180º.
  9. Llenar las cápsulas un poquito más de la mitad y hornear 20min las grandes y 12-15min las pequeñas.
  10. Dejar enfriar 5 min en el molde y luego pasarlas a una rejilla a que se enfríen de todo.
Preparación (buttercream) :
  1. Tamizar el azúcar glass y reservar.
  2. Mezclar la leche con el Nesquik y reservar.
  3. Meter todo en un bol y batir a velocidad baja 1 min y luego a velocidad alta 4-5min.
Esta última vez las he hecho con la thermomix, porque con el brazo en mi estado no era muy viable ponerse a batir tanto. La preparación con la thermomix la pondré en unos días.

Los cupcakes grandes no fuimos capaces de comérnoslos porque -he visto matar a gente por menos de lo que voy a decir- eran demasiado dulces! Y lo digo yo, que me tomo leche condensada directamente del bote a cucharadas. Los pequeñitos pude comerlos gracias a la acidez de las fresas, que sino tampoco. Al final resulta que no soy una de esas trendy housewive,s y mi conejillo de indias también es muy poco trendy, así que volveremos a las galletas de toda la vida, aunque he de reconocer que los pequeños con la fresa estaban de vicio y no me los comí todos en la misma tarde por vergüenza.

Alcachofas con bechamel

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Esta es una cena que mi Sr. Padre preparaba cuando tenía tiempo, porque sin thermomix tiene que dar bastante trabajo, aunque también se puede hacer con bechamel prefabricada, lo que convierte esta cena en una comida-rápida.

Ingredientes:(para 2 raciones)
  • 3/4 de litro de bechamel
  • alcachofas (Compro latas de corazones de alcachofas, traen entre 6 y 8, aunque si fuese a comer alguien más que yo pondría alguna más, pero mi conejillo de indias pasa en canoa de las alcachofas)
  • 75gr jamón cortado en taquitos
Ingredientes para 1 litro de bechamel: (thermomix)
  • una cucharada de aceite de oliva virgen extra
  • 50gr de mantequilla
  • 800 gr de leche (yo uso sin lactosa desnatada)
  • 110 gr de harina
  • una pizca de sal
  • una pizca de pimienta
  • una pizca de nuez moscada
Preparación de la bechamel:

  1. Poner en el vaso el aceite y la mantequilla. 1minuto, 37º, velocidad 2.
  2. Añadir la harina. 2 minutos, 100º, velocidad 1.
  3. Añadir la leche, la sal, la pimienta y la nuez moscada. 5segundos, velocidad 7.
  4. Ahora 7minutos, 100º, velocidad 4.
Preparación: 

  1. Untar una fuente de horno con mantequilla y cubrir el fondo con bechamel.
  2. Cortar los corazones de alcachofas y colocarlos, junto con los taquitos de jamón, encima del fondo de bechamel.
  3. Añadir el resto de la bechamel
  4. Hornear a 180º durante 20-30min (hasta que la bechamel esté doradita)

La foto es un poco lo peor, pero a mi no me gusta muy dorada 


Crema de las malditas lentejas

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Las lentejas son una de mis comidas preferidas, pero, por h o por b nunca me salen salían bien. Cuando no están duras, están sosas, si están bien de sal están aguadas… ¡Un desastre! Mi conejillo de indias me dijo que por qué no probaba con la thermomix, que para eso estaba. Al principio me hice la remolona, porque no me gusta que una máquina cocine por mí (batir sí, amasar también, pero que me haga el plato completo… ¡me niego!). Al final, harta de los desastres, cedí ante la maquinita y le dejé que me hiciese las malditas lentejas. El resultado final me hizo casi-gracia: estaban aún peores que las mías (¡chúpate esa, thermomix!)
Pero resulta que las malditas lentejas estaban conchabadas contra mí, y el día que me puse a hacerlas a una mano (la otra estaba guardadita en el cabestrillo) las muy hijas de su madre salieron perfectas. Dudo si fue por pena, o porque las dejé en paz, me explico: como siempre me salen mal las tengo en vigilancia constante y me paso a ver cómo están cada 3 minutos, por si les hace falta agua, sal o mimos. Pero esta vez, con mi bracito roto, tenía más cosas que hacer, como ir andando a la farmacia, así que las dejé al fuego y me fui. Volví casi corriendo pensando que se habrían quemado, pegado o quedado más secas que la mojama... y cuál fue mi sorpresa cuando llegué y vi que estaban en perfectas condiciones.

Bueno, a lo que iba, que con lo de que esta vez me han salido bien me he emocionado. Cuando no están perfectas de aspecto (porque se han deshecho mucho, o están un poco aguadas) o cuando me ha sobrado demasiado preparo una cena con la batidora, el chino y un poco de pan.
Pongo "mi" receta de lentejas, para empezar la crema.

Ingredientes:(para 2)
  • 2 vasitos de lentejas
  • Agua 
  • Sal
  • Un chorizo
  • Un trozo de panceta
  • Una hoja de laurel
  • Un chorrito de aceite de oliva
Preparación:
1.     Se ponen en la olla las lentejas y se cubren con agua (más del doble de agua que de lentejas) y se le echa el chorrito de aceite, un poco de sal, y la hoja de laurel.
2.     Se pone a fuego medio, se corta la panceta y el chorizo y se añaden a la olla.
3.     Se deja cocer aproximadamente una hora (esto depende mucho del agua, y es mi gran problema), hasta que dejen de estar duras (como es para hacer crema, aunque se deshagan tampoco pasa nada)
4.     Se dejan enfriar un rato y se le quita la hoja de laurel, el chorizo y la panceta (a mí me gusta añadir luego el chorizo como "tropezón" pero también se puede pasar por la batidora)
5.     Se pasa por la batidora, si han quedado muy espesas se les añade un chorrito de leche.
6.     Se pasan por el chino un par de veces, hasta que no queden pieles
7.     Se fríen unos dados de pan de molde, para hacer picatostes, y se corta el chorizo (y la panceta) en trocitos, que se añaden ya en el plato de crema.

Crema sin chorizo ni panceta

Descanso por obras

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Estuve una semana de vacaciones pero no salió todo lo bien que yo esperaba, así que pasaré una temporadita sin cocinar nada, porque no puedo ni pelar patatas (ni atarme los cordones, vaya).

mi bracito por dentro

Bizcocho en cadena de las monjas de Sevilla

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Este bizcocho, que realmente se llama Bizcocho de las Carmelitas Descalzas de Sevilla y que yo he rebautizado como el bizcocho en cadena de las monjitas, es como un mail de esos que si no envías a 500 contactos es porque no quieres a tus amigos y estarás condenado al infierno, pero con la diferencia de que éste se come y está muy rico.
Tienes que tener un vasito de masa madre para poder hacerlo, no se puede sacar de la nada (a mi me la dió mi casi-suegra hace quince días, y a ella su cuñada hace un mes y a ésta una vecina hace un mes y medio y... así hasta tiempos inmemoriables).
Los ingredientes se medirán en "vasos", siendo un "vaso" la cantidad recibida de masa-madre. No se utilizarán ni la batidora, ni la nevera, ni el microondas ni nada que nos imaginemos que no habría en un convento de Sevilla del siglo XVI (por poner una fecha...).

Un vaso de azúcar

Las instrucciones de preparación serán por días a partir del primer jueves, aunque la masa te la dan normalmente en fin de semana (yo he dado una el sábado, otra porción el domingo y la última la recibieron el lunes) como no se empieza a "trabajar" con ella hasta el jueves ese lunes-martes-miércoles, la masa estará en el vasito tal y como la recibimos (aunque aumentará de tamaño):

El vaso de masa-madre ya crecida (el jueves)


Ingredientes:
  • 4 vasos de harina (en 3 días)
  • 3 vasos de azúcar (en 3 días)
  • 2 vasos de leche (en 2 días)
  • 1 vaso de aceite de oliva o girasol (el último día)
  • 1 vaso de almendras o nueces picadas (el último día)
  • 1 vaso de pasas sin hueso previamente enharinadas (yo usé pepitas de chocolate, rompiendo la tradición, pero es que con las pasas no puedo)  (el último día)
  • 1 sobre de levadura  (el último día)
  • 2 huevos enteros  (el último día)
  • 1 manzana troceada  (el último día)
  • 1 pizca de sal  (el último día)
  • 1 pizca de canela  (el último día)
  • 1 pizca de vainilla  (el último día)
  • 1 ralladura de naranja  (no se la puse porque no tenía naranjas y tampoco es que me encante el ácido que deja) (el último día)
Preparación:
  • Jueves: Se vierte todo el contenido del vaso en un recipiente (en un bol) y se añade un vaso de azúcar y otro de harina, pero no se mezcla. 
  • Viernes: Se mezcla con una cuchara.
  • Sábado: No se toca.
  • Domingo: No se toca.
  • Lunes: Se añade un vaso de azúcar, otro de leche y otro de harina. 
  • Martes: No se toca.
  • Miércoles:  No se toca.
  • Jueves:  No se toca.
  • Viernes:  ¿Adivináis? ¡Qué no se toca!
  • Sábado:  Aquí ya viene todo lo gordo:
    1. De la masa se sacan 3 vasos (medida universal) que se repartirán a otras 3 personas para no romper la cadena.
    2. Con lo que queda (que será poco más que un vaso) es con lo que se va a trabajar:
      1. Se añaden los 2 vasos de harina
      2. El vaso de azúcar
      3. El de aceite
      4. El de almendras/nueces
      5. El de pasas (cho-co-la-te) (yo prefiero echarlo cuando ya está toda la masa en el molde para que no se apelotonen en el fondo.
      6. Un sobre de levadura (cucharadita y media)
      7. Los dos huevos
      8. La manzana
      9. Las pizcas: de sal, de canela y de vainilla
      10. La ralladura de naranja
    3. Se mezcla todo con una cuchara y se mete al horno a 180ºC durante 40-45min y luego otros 20min a 180º (a los 15min se pincha con un palillo y si el palillo ya sale limpio se puede sacar, sino se deja otros 5 minutitos más).
    4. Cuando se enfríe, se desmolda y... ¡listo para comer!
Voilá

Edito:
Uno de los vasitos se lo llevó mi madre y... rompió la tradición milenaria. La vi echando todos los ingredientes y digo: "oye, ¿dónde tienes los vasos con el resto de la masa?" ... pues con el resto de la masa los tenía! así que preparó dos bizcochos, uno un poco más grande que el otro, pero estaban los dos muy ricos, y santo remedio, au revoire cadena!

    Crêpes (o filloas)

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    Este es uno de los postres que más me gusta, se pueden hacer casi de cualquier cosa, de hecho no tienen por qué ser dulces (aunque yo siempre las tomo así). Se pueden rellenar, por ejemplo, de txangurro.
    Las primeras veces que iba a preparar el moado1   terminaba llamando a mi Sr. Padre para preguntarle la cantidad que debía poner de cada ingrediente, porque tenía la lista, pero sin “números”.  Siempre la misma respuesta: “Uuuy, eso… no tiene medidas ¡A ojo!”. Me dio unas medidas básicas para poder empezar, aunque luego hay que rectificar para arreglarlo.

    Ingredientes (para empezar):
    • 1 cucharada sopera de harina 
    • 1 cucharada sopera de maizena
    • 1 huevo entero y una yema de otro
    • leche
    • "2 dedos" de mantequilla
    • una pizca de sal
    • un chorrito de aceite
    Preparación:
    1. Se ponen la harina y la maizena en un cacharro apto para batidora y se le añade un chorro de leche, un poquito de aceite, una pizca de sal, la mantequilla derretida, el huevo y la yema.
    2. Se bate todo. Si queda muy espesa se le añade leche y si queda muy suelta se le echa más maizena (para rectificar mejor utilizar sólo maizena, nada de harina). Tiene que quedar líquida pero un poco espesa. Si queda muy líquida se romperán porque serán demasiado finas, mientras que si queda muy espesa no se harán bien, serán gordas y también se acabarán rompiendo.
    3. Se deja reposar en la nevera como mínimo una hora.
    4. Se calienta la sartén untada con mantequilla y se echa un cazo de moado, repartiéndolo bien por todo el fondo de la sartén, se deja unos segundos y se separan los bordes de la filloa de la sartén con un cuchillo, se le da la vuelta agarrándola desde un borde y se deja unos segundos más (presionar un poco si no se pega bien al fondo después de darle la vuelta)
    5. Si no salen bien, aquí también se puede rectificar de leche o de maizena.
    P.D. Después de hacer cada filloa se limpia la sartén con un pincel de silicona.
    P.D.2. Ya en el plato rellenar al gusto... miel, leche condensada, azúcar, nocilla, crema pastelera...

    Es la primera filloa que hice, pero es la única foto que tengo. Con el resto no pude, se acaban antes de que saque el móvil.

    1: Escribiendo este post he descubierto que realmente se llama “amoado”, pero toda mi vida le he llamado moado y así voy a seguir llamándolo. Es la pasta o crema con la que se hacen las filloas.

    Crema de guisantes de Hulk

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    Esta crema es muy sencillita y muy rica. La receta salió de Casa Marcelo,  un restaurante en Santiago en el que no puedes elegir los platos, sino que tienen un menú con 5 platos pequeños, diferentes cada día. Nos la sirvieron una de las veces que fui a comer allí con mis padres y me encantó! Así que mi Sr. Padre la imitó en casa (imitó pero le sale mejor que la original) y me pasó la receta:

    Ingredientes:
    • Guisantes congelados
    • Aceite de oliva 0,4 para cocer
    • Sal
    • Leche
    • Aceite de oliva hojiblanca para decorar
    • Un par de berberechos por plato (opcional, opcionalísimo porque no nos gustan y los he quitado)
    Preparación:
    1. Cocer los guisantes con mucha agua, sal y un chorrito de aceite.
    2. Cuando estén tiernos se escurre casi toda el agua, pero reservar algo.
    3. Se baten los guisantes al tiempo que se añade leche y el agua de cocerlos hasta que tenga la textura de la crema.
    4. Pasar por el chino un par de veces, hasta que no queden pieles de guisante.
    5. Servir y añadir un chorrito de aceite de oliva hojiblanca en el centro y colocar los 2 berberechos encima (o no).
    Tiene un color súper bonito, aunque parezca radioactiva.




    Mastrujadas: macarrones con atún al micro

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    Este plato es rápido y facilísimo de preparar. Lo recuerdo un poco de memoria, porque la última vez que lo vi hacer yo tendría unos 12 años (como máximísimo). Nos la hacía la madre de una amiga mía del cole cuando iba con prisas y me encantaba. Luego, cuando me mudé para ir a la universidad y empecé a hacerla yo, pero no estoy segura de que la receta original fuese esta.

    Esta mastrujada no me he atrevido a dársela a probar a nadie, me lo como yo solita cuando llego de trabajar a las casi-cuatro. A mi conejillo de indias le expliqué como era y por la cara que puso aun no me he atrevido a ponérselo en el plato.

    Ingredientes (para una persona):
    • Macarrones (aunque acepta cualquier tipo de pasta, yo esta vez lo he hecho con corazoncitos)
    • Una lata de atún en aceite de oliva
    • Salsa de tomate frito
    • Un huevo
    • Queso rallado (opcional)
    Preparación:

    1. Se cuece la pasta en abundante agua con sal. 
    2. Cuando empieza a estar cocida (si nos gusta al dente hay que sacarla un poco antes) se escurre bien y se pone en un recipiente apto para microondas (yo uso una fiambrera -tupper si se dice en moderno-).
    3. Se añade el atún, se echa el huevo crudo sin batir (tal cual sale de la cáscara), la salsa de tomate y el queso rallado. 
    4. Se mezcla todo bien y se mete al micro un par de minutos. Si cuando lo saquemos el huevo sigue crudo lo volvemos a meter un ratito más hasta que la clara esté blanca. Es mejor ponerlo varias veces e ir revolviendo cada vez, porque si se pasa el atún queda hiperseco.
    5. Se saca del micro, se pone en un platito y si queremos le podemos añadir un poquito más de queso rallado. La pinta es bastante dudosa, pero de sabor a mi me gusta mucho.





    Hasta aqui todo bien, salvo que las fotos las he sacado con la misma velocidad que he preparado la comida y han quedado un poco horrible



    La pinta de esto no hay photoshop que lo arregle

    Truqui: Para que la pasta quede más suave, después de escurrirla se vuelve a poner al fuego con una cucharadita de mantequilla y se revuelve hasta que la mantequilla se derrita completamente y empape la pasta.

    Regalos de Sus Majestades de Oriente

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    Este año los Reyes Magos han venido muy cocinitas, aquí van los regalitos:

    • Una donutera superchuli. Ya estoy buscando recetas para estrenarla, aunque también trae un librito con unas cuantas, que será por donde empiece. Ya publicaré las recetas que vaya probando. 



    • Un pañuelo de PG muy original, puesto parece un pañuelo normal pero lo extiendes y aparece... ¡la receta de la tortilla de patatas!



    • Y para amenizar las horas de cocina, una base para cargar y reproducir música del iphone/ipad: 





    Lo mejor del soporta-ipad es que tiene un mando flour-resistant:

    También Papa Noel vino gastronómico,"me" (compartimos, que es muy diver) trajo un juego para hacer chuches y la verdad es que nos lo pasamos pipa los dos, pero creo que yo mucho más que él. El primer día hicimos gominolas de cocacola y nubes rositas. Volveré a hacerlas y subiré alguna fotito (además de la receta, claro).




    Espirales bicolor

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    Esta receta es del libro Recetas básicas de chocolate,  que me regaló mi Sr. Padre en una de sus primeras visitas a mi nuevo hogar.

    Ingredientes (da para unas 20-25 galletitas):
    • 125gr de mantequilla a temperatura ambiente como mínimo (yo la meto un ratito en el micro, aunque normalmente se me acaba derritiendo por completo y... no mola, así que ojo con el tiempo)
    • 250gr de harina
    • 150gr azúcar glass
    • 1 huevo
    • 20gr de cacao en polvo valor
    • 4 cucharaditas de azúcar de vainilla
    • un poco de azúcar 
    Primero se ablanda la mantequilla y se mezcla en un bol con el azúcar glass y la vainilla. Si la mantequilla se ha derretido por completo, se mezcla igual, se mete un par de minutos en la nevera y se vuelve a mezclar hasta que no quede nada líquido.

    Aquí la mantequilla se me había derretido. La foto es después de meterlo de nuevo en la nevera y volver a mezclar.

    Luego se le añade el huevo y se mezcla bien.




    Cuando ya se tiene una mezcla homogénea se añade la harina y se mezcla bien, obteniendo una bola homogénea (no hay que trabajar demasiado la masa). Se parte la bola en dos mitades y a una de ellas se le añade el cacao, mezclándolo bien para que el color quede uniforme, y se guardarán 15 min en la nevera.
    Se extienden las dos masas por separado formando dos rectángulos de medio centímetro de grosor (para que queden rectángulos iguales cuando ya tengo la masa extendida las corto poniendo medio folio encima)
    Se coloca el rectángulo de chocolate encima del otro (ojo, la lámina rompe con facilidad, para evitar cristos yo lo que hago es cortar las masas encima de papel de horno para luego poder volcar el rectángulo de chocolate encima de la sin-choco, con cuidadito para que coincidan) y se enrollan con cuidado (también rompe, si pasa eso hago trampa y estiro un poquito la masa de fuera (la sin-choco) hasta que remiende y no se note la grieta).
    Ahora se reboza el rollo en azúcar y se precalienta el horno a 180º. Se va cortando el rollo en rodajitas y se colocan encima de papel de horno en una bandeja.
    Se hornean durante 15-20 minutos, se dejan enfriar y listas para comer :)



    Nota: Hay que sacarlas del horno cuando empiezan a estar doradas, sino tendrás piedras bicolor.

    Empecemos

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    No sé muy bien cómo empezar, así que contaré lo imprescindible: me gusta cocinar pero no tengo ni idea (realmente soy un desastre) así que no esperéis (al menos de momento) ningún plato súper elaborado ni ninguna idea innovadora de cocina.
    En realidad, el objetivo de este blog es ir escribiendo las recetas que voy probando, y de esta forma obligarme a hacer cosas nuevas y, de paso, poder tener mi bloc de notas online.
    Las recetas que haré, en un principio, serán las sacadas de blogs, de libros de cocina, o -como no- de las llamadas por teléfono a mi Sr. Padre.